Como un copo de algodón
de enrulada fantasía,
voy de rincón en rincón
repartiendo mi alegría.
Nunca estoy de mal
humor,
siempre espero una
caricia,
y mi donación de amor
contrapongo a la
avaricia.
Mis grandes ojos café
te miran con
transparencia,
devolviéndote la fe,
borrando toda carencia.
Como un pompón agitado
en cada nueva mañana,
te prometo ilusionado
alborozo en caravana.
Soy dulce como la miel;
Sugar me han puesto por
nombre,
transpiro amor por la
piel ,
soy “fiel amigo del
hombre”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario