sábado, julio 09, 2011

Obra de Juan Pérez Bonalde

Algo de lo escrito por Juan Pérez Bonalde: (FRAGMENTOS)

Vuelta a la Patria  

Volad, volad, veloces,
ondas, aves y voces!
Id a la tierra en donde el alma tengo,
y decidle que vengo
a reposar, cansado caminante,
del hogar a la sombra un sólo instante.
____

“¡Caracas allí está; sus techos rojos,
su blanca torre, sus azules lomas
y sus bandas de tímidas palomas
hacen nublar de lágrimas mis ojos!

Caracas allí está; vedla tendida
a las faldas del Ávila empinado,
Odalisca rendida
a los pies del sultán enamorado
____

¡Apura, apura postillón.  Agita
el látigo inclemente!
¡Al hogar, al hogar, que ya palpita
por él mi corazón… mas, no, detente!
¡Oh infinita aflicción,  Oh desgraciado
de mí, que en mi soñar hube olvidado
que ya no tengo hogar…! Para, cochero,
tomemos cada cual nuestro destino;
tú, al lecho lisonjero
donde te aguarda la madre, el ser divino
que es de la vida centro de alegría,
y yo..., yo al cementerio
donde tengo la mía.


Flor

Flor se llamaba: flor era ella,
flor de los valles en una palma,
flor de los cielos en una estrella,
flor de mi vida, flor de mi alma.

Era más suave que blando aroma;
era más pura que albor de luna,
y más amante que una paloma,
y más querida que la fortuna.

Eran sus ojos luz de mi idea;
su frente, lecho de mis amores;
sus besos eran dulzura hiblea,
y sus brazos, collar de flores.

Era al dormirse tarde serena;
al despertarse, rayo del alba;
cuando lloraba, limbo de pena
cuando reía, cielo que salva.

______

Señor! ¿existes? ¿Es cierto que eres
consuelo y premio de los que gimen,
que en tu justicia tan sólo hieres
al seno impuro y al torvo crimen?

Responde entonces: ¿Por qué la heriste?
¿Cuál fue la mancha de su inocencia?
¿Cuál fue la culpa de su alma triste?

¡Señor, respóndeme en la conciencia!

Alta la llevo siempre, y abierta,
que en ella nada negro se esconde;
la mano firme llevo a su puerta,
inquiero... y nada, ¡nada responde!

¡Sólo del alma sale, un gemido
de angustia y rabia, y el pecho, en tanto
por mano oculta de muerte herido,
se baña en sangre, se ahoga en llanto!

¡Y en torno sigue la impía calma
de este misterio que llaman vida,
y en tierra yace la flor de mi alma,
y al lado suyo mi fe vencida!

______

Nada, ni la esperanza
ni la fe del creyente
en la ribera nueva,
en el divino puerto
donde la barca que las almas lleva
habrá de anclar un día;
ni el bálsamo clemente
de la grave, inmortal filosofía;
ni tú misma, divina poesía
que esta arpa de lágrimas me entregas
para entonar el aéreo de mi duelo...!
¡Tú misma no, no llegas
a calmar mi dolor...!


¡Ábrase el cielo!
¡Desgájese la gloria en rayos de oro
sobre mi frente... y desdeñosa, altiva
de su mal sin consuelo
al celestial tesoro
el alma mía cerrará su puerta:
que ni aquí, ni allá arriba
en la región abierta
de la infinita bóveda estrellada,
nada hay más grande, nada:
más grande que el amor de mi hija viva,
más grande que el dolor de mi hija muerta!


JUAN ANTONIO PÉREZ-BONALDE PEREIRA, Poeta Venezolano

Venezuela ha parido muchos escritores y poetas notables en todos los tiempos, pero es en la era republicana  (que comienza su primera etapa del 19 de abril de 1810 al 30 de julio de 1812 - cuando fueron iniciados  los  actos  orientados al logro de la independencia absoluta del país)  que surge el poeta venezolano más destacado, de clara autenticidad romántica y precursor del modernismo, que llevó por nombre  Juan Antonio Pérez- Bonalde Pereira y vio por primera vez la luz en Caracas el 30 de enero de 1846 (momento en que la nación comienza a vivir la etapa agitada de su republicanismo) en un hogar  que por tradición y convicción fue liberal y civilista, lo cual habría de traerle problemas en esa Venezuela enfrascada en constantes disputas de carácter político.  
Al momento de su nacimiento ya se había impuesto el Romanticismo en América, siendo los poetas románticos de España y Francia los modelos a seguir sin que hubiese prevalecido uno  de carácter universal aún.
Políglota, pues comprendía  inglés, alemán,  francés,  italiano,  portugués, sueco, holandés, griego y  latín, luego de su emigración en unión de sus padres a Puerto Rico (para refugiarse de la guerra que se desarrollaba en su tierra) donde tuvo la oportunidad de ayudar como profesor a su progenitor paterno  en una escuela que éste fundó allí y estudiar música, dibujo e idiomas, permitiéndole  el  dominar varias lenguas hacer la traducción de otros poetas como Allan Poe.
En 1.864 retorna a su país y fallece su padre. Luego se reinicia la guerra civil y asume el mando el caudillo Antonio Guzmán Blanco, al cual él se opone escribiendo en su contra por lo cual es perseguido y realiza su propio destierro nuevamente en 1.870 para residenciarse en Nueva York, donde laboró en una fábrica de perfumes como agente vendedor y pudo viajar, representando a la firma, a varias regiones de Norteamérica y conocer otros continentes como Asia, África y Europa, afrontando también  desde EEUU la muerte de su madre.
Para 1876 vuelve nuevamente a su lugar natal tras los cambios políticos que se suceden y en el trayecto de su viaje en barco y bajo una conmoción de sentimientos escribe “Vuelta a la Patria”, dividido en dos partes. La primera influenciada por los recuerdos de la querida región que se vuelve a ver luego de haber tenido que permanecer alejado por tanto tiempo y la segunda por el  dolor que le representa la muerte de su madre.
Escribió dos Poemarios: Estrofas (1877) que incluye “Vuelta a la Patria”  y Ritmos (1880) contentivo de otros notables poemas como “El Canto al Niágara” (una de sus más alabadas composiciones).
Se casó en 1879  y escribió el poema “Flor” ante la muerte de su pequeña hija  en 1883, dueña de su amor  y  de su alegría, para ya no escribir nada más de su propia autoría.
Estos, así como otros escritos de diferentes lugares, no imitaron el romanticismo europeo sino que fluyeron a partir de su misma intimidad extrayendo  los temas de las propias circunstancias que asediaron su vida.
Sucumbió a las drogas y al alcohol al enfrentar muchos dolores en su existencia, lo cual debilitó su salud, muriendo a la temprana edad de 46 años,  el  4 de octubre de 1892 en La Guaira, Venezuela.